Un músico excepcional en un lugar maravilloso. La sesión que se recoge en este disco corresponde al concierto en solitario que tuvo lugar el 24 de febrero de 2012 en el Palau Falguera en Barcelona. El programa, con diez piezas, está dividido en dos grandes bloques, por un lado estándares del jazz y por otro clásicos del repertorio latinoamericano. La sonoridad de la sala le aporta a cada tema una dimensión única ─no fue casual la elección del auditorio─, cada interpretación suena brillante, notas electrizantes y envolventes. El pianista gaditano en los últimos años ha realizado un viaje transatlántico que le ha llegado desde la bahía de Cádiz hasta el estuario del río Hudson, la gran mazana le ha puesto puerta con puerta con algunos de los músicos más importantes de la escena del jazz mundial (entre los que se encuentra el propio músico curtido en su juventud en el rock andaluz para evolucionar el jazz-flamenco). Pero desde mucho antes de llegar a EE.UU. su carrera se ha nutrido proyectos que lo llevaron por todo el mundo, como su participación en “Calle 54” de Fernando Trueba ─que le hizo muy conocido─, y encuentros únicos como el trabajo junto a Paquito D´Rivera, Wynton Marsalis, Chucho Valdés, Harbie Hancock y Michel Camilo, además de los discos junto a Martirio, el guitarrista Niño Josele (entre una larga lista de músicos). Ha firmando discos que han aportado un nuevo lenguaje musical, como New Flamenco Sound (2006) ¡con una decena de grandes músicos en escena! “Escarbo en el piano todos los días y alguna vez encuentro una piedra preciosa. Soy buscador y no tengo ninguna gana de convertirme en una caricatura haciendo siempre lo mismo” afirma Chano, y así lo consigue en cada nuevo proyecto ofreciendo lo mejor de sí mismo, la mejor música posible.