Han dejado pasar cuatro años desde el primer disco, ‘Sol de los Soles [1]’ (2018), pero el seiguente trabajo del proyecto de Águeda Sastre Zamora, en el violín, y Carlos Martín Aires, en el bouzouki y voz) está concebido como un complemento del que fue su debut y con el que siguen un particular recorrido sonoro por los bailes, danzas y canciones tradicionales. Piezas de ayer, hoy y siempre. El dúo de Valladolid incluye una colección de piezas donde el acercamiento a la tradición se hace desde el respeto y a la vez con una mirada libre de todo tipo de prejuicios. La fuente a la que han recurrido nuevamente son los nutridos archivos Fundación Joaquín Díaz, en su mayor parte de allí han salido junto a otros cancioneros. La pieza que da título al álbum es una canción de ronda tradicional de los pueblos de Pollos y Castronuño, basada en una viaja grabación de una vecinas y a la que han añadido alguna estrofa para completarla, con un resultado emocionante que está impregnada de pasado y remozada por una visión actual. De cada una de las canciones podemos saber detalladamente su origen, de dónde la aprendieron, y como la hacen suya, gracias a las sintéticas y detalladas notas en la carpeta. También participan en los temas como invitados, José María Climent (violín), Jaime Muñoz (flautas), Luis Ángel Fernández (dulzaína) y Jaime Vidal (caja). Una delicatesen, acústica, serena y de dulce luz.