El cuarto álbum de Carla Pires [1] proponer “viajar así”. Porque la música portuguesa atesora raíces múltiples, es cosmopolita a la vez que tiene fuertes orígenes rurales, es local y también aventurera. El fado es el vehículo sonoro para ir de uno a otro lugar, impregnándose se otras tradiciones, resonar por los caminos y enriquecerse con las aportaciones. Los temas de las letras son tan universales como intemporales, “el desconcierto de una pérdida amorosa, el ajuste de cuentas con la vida y el destino, los encuentros en paisajes de silencio y soledad, la partida, la aventura, la suerte, la nostalgia pero también el regreso y la fiesta” todos pasan por los catorce temas que entrega, de los que 11 son originales con letra de Amélia Muge ─directora artística, que además aporta el temas que da título al álbum, además de otros temas─, Tiago Torres da Silva, Manuela de Freitas, Maria do Rosário Pedreira, Carla Pires, André M. Santos y Joaquim Balas y composiciones de Amélia Muge, André M. Santos, Francis Hime, Ivan Lins, Joaquim Balas, Michales Loukovikas y Samuel Quedas. Entre los músicos la guitarra portuguesa de Bernardo Couto, y la clásica de André M. Santos y el contrabajo de João Novais… Este álbum confirma las impresiones de los anteriores, ─‘Aquí [2]’ (2016), ‘Rota das Paix Õ es’ (2012) y ‘Ilha do meu Fado’ (2005)─, la capacidad de expresar emociones que en este caso nos lleva por todos los rincones del planeta.