A Henricus Isaac (1450-1517), uno de los mayores compositores del Renacimiento pero injustamente olvidado, está dedicada esta nueva grabación de Jordi Savall junto con La Capella Reial de Catalunya y Hesperión XXI. Isaac nació en Brabante, desde Flandes viajó por toda Europa para instalarse desde 1485 en Florencia bajo la protección y admiración de los Médicis para llegar a ser el principal compositor de la corte. Para Savall fue un “compositor prolífico e innovador que nos ha dejando una de las producciones musicales más importantes de su época y siempre se distinguió por el dominio absoluto de arte del contrapunto y la polifonía” ya fuese en las piezas vocales de carácter religioso y canciones profanas, o instrumentales. El maestro en las líneas que acompañan la excelente grabación, se pregunta por qué este genio con una obra como la que creó sigue siendo poco conocida en nuestros días. Lo cierto es que su páginas cayeron en el olido hasta finales del siglo XIX y comienzos del XX, una ausencia de los auditorios aún mayor por la dificultad de encontrar las fuentes originales (una situación demasiado frecuente también en otros autores). Este álbum trata de hacer un homenaje recorriendo la diversidad y riqueza de su música.