Dicen que las canciones que forman parte de este disco no son si no fruto de un milagro, o más, “el milagro de La Naturaleza, en cuya belleza anidan todos los sentimientos que, en verdad, necesitamos, el milagro de transmitir estos sentimientos sin adueñarnos de ellos…”. La aterciopelada voz de Victoria Cruz y la guitarra de Gabriel Pancorvo, junto con el chelista César Jiménez, hacen una hermosa revisión del fado tradicional lisboeta desde Granada.