Capturar la esencia tradicional, contextualizarla y hacer una lectura contemporánea, así lo entienden, crean e interpretan Tomás García Martínez, Enrique González, Mari Cruz Sanchez Lopez, Juan José Robles, Carmen María Martínez Salazar. Después de abordar en el disco anterior la diversas etapa de la vida, ‘Las edades de la vida [1]’ (2017), entregan su segundo álbum ─al que abría que sumar otro precedente donde recogían piezas fruto de un trabajo de campo, ‘Mujeres con raíz. Patrimonio sonoro murciano’ (2015), la tradición tal y como se ha conservado de generación en generación─, una docena de piezas, el grupo murciano traza un arco, una ruta o camino que nos llevaría desde el momento que sale por el este los primeros rayos de sol emergiendo de las aguas mediterráneas, hasta la puesta por el oeste en el horizonte travesando las tierras ibéricas del interior. En el trayecto, de un día o de generaciones, se puede advertir el pasado, la memoria, las rutinas cotidianas que como bien apuntan en el proyecto no son objeto de atención de la Historia que está más interesada de tratados, gobernantes y desencuentros bélicos. En la producción, grabación, mezcla y masterización, Constantino López; fotografías, Joaquín Zamora; y diseño gráfico e ilustración de portada, Nacho Muñoz. Cantan por jotas, aguilandos murcianos, seguidillas, malagueñas abandolás, mayos, cantos de trabajos, seguidillas parrandas, seguidillas peretas, habaneras, canciones infantiles, rancheras totanera,.. “Música, fiesta y salud”… todo queda dicho, que así sea.