Rayssa Fatima Tabaamrant debe su nombre, como el resto de rways bereberes, al nombre de la tribu de la que proviene, un grupo étnico asentado en el sur de Tiznit y distinguida por su reputación guerrera contra la colonización francesa. Los rways en lengua bereber, descendiente del término árabe que designa al maestro o jefe, vendrían a ser una especie de trovadores o griot si buscamos un equivalente en la cultura africana.Y así es la carismática y temperamental Raysa Fatima, nacida en el Anti-Atlas en los años sesenta y que ha pasado su infancia en el medio rural, sin asistir a la escuela y trabajando duro en el campo tras el fallecimiento prematuro de su padre. Desde pequeña baila y canta, como es tradición entre los bereberes, y en sus cantos habla, mientras se acompaña de un violín monocorde que marca el característico sonido repetitivo e hipnótico, de cuestiones de tipo cultural, social, reflexiones sobre cuestiones sociales y sobre su condición de mujer. Este álbum se suma a los trabajos que hay en formato de cassette, en las populares ediciones marroquíes en disco compacto, y las grabaciones de documentales sobre su vida, como “Tihya” donde ella misma interpreta el papel cantante. Fuerza, pasión y valentía en estado puro, sus recitales son seguidos en Marruecos como todo un acontecimiento.