Con este álbum Renzo Ruggiero inicia una nueva etapa en su vida, quiere ser el fiel reflejo de un momento de cambios que han propiciado una intensa creatividad artística. En total son 11 temas los que se incluyen en el disco, piezas instrumentales que transmiten sus sensaciones, emociones e impresiones en un “paisaje sonoro” que remite a las músicas de raíz, étnicas, antiguas, la contemporánea y el ambient. El músico italiano se ha establecido en Toledo desde hace más de un lustro y colaborador de Ana Alcaide, Julián Maeso, Rhodes and Chelo, ha registrado las composiciones con una plantilla de músicos de varios países: la cantante tradicional japonesa Anna Sato, el multi instrumentista Javier Paxariño, el guitarrista Amable Rodríguez, el intérprete de oud sirio Hames Bitar y el laudista italiano Michele Carreca. La especialidad de Ruggiero es el santur, un instrumento de origen persa, aunque en sus inicios sus estudios musicales en Italia fueron el bajo eléctrico y la improvisación de jazz. Finalmente serán los instrumentos del área mediterránea a los que se dedicará. También en la nyckelharpa se ha fijado, el instrumento sueco de cuerda frotada. Es todo caso, afirma que “le gusta sacar de contexto a los instrumentos que él toca para darle una connotación más personal”, finalmente los utiliza como una herramienta capaz de expresarse a través de la música. Un paisaje sonoro caleidoscopico impregnado de sensaciones, y placeres musicales.