Un proyecto dirigido por Pedro G. Romero, producido por Raül Refree y protagonizado por “Perrate” [1] ─Tomás Fernández Soto (Utrera, 1964), conocido antes de este álbum como “Tomás de Perrate”─. Cada uno de estos nombres nos lleva a un universo extraordinario, enraizado y vanguardista hasta la misma raíz. El cantaor desciende de una de las grandes dinastías gitanas del cante flamenco: nieto de Manuel Torre, hijo de “Perrate de Utrera” y sobrino de “María la Perrata”; por si fuera poco aún hay que recordar que está emparentado con los Peña, primo del Juan Peña “El Lebrijano”, tío segundo de Dorantes, los “Agujetas” o Bambino. Un árbol genealógico de primera magnitud, insuperable en herencia, conocimiento y sabiduría. El título hace referencia a un fandango callejero de Los Gaiteros de San Jacinto, un grupo colombiano en la tradición de la música africana que llevaron los esclavos y libertos de la zona del Pacífico ─se lo hemos escuchado a Totó la Momposina en alguno de sus discos para la emblemática etiqueta Real World Records [2]. A Refree ─Rocío Márquez [3], Niño de Elche [4], Rosalía…─ le reconocen ser “el productor que mejor ha definido el sonido radical del flamenco”, y aquí da nuevamente avanza dando pasos certeros que no desprecian el riesgo. Hay chaconas, fandangos callejeros, folías, seguiriyas del Nitri, la Cherna y José de Paula, romances, jácaras, soelás de la Serneta, bulerías… Perrate redicamente flamenco, crudo, libre y sobrecogedor.