•  El multiinstrumentista electrifica la milenaria zanfona y la somete a diferentes efectos sonoros para obtener texturas ambientales, momentos psicodélicos y densas murallas sonoras.
• El concierto en solitario tendrá lugar el próximo viernes en La Llimera, Valencia.

El primer proyecto donde Efrén López es el único músico sobre el escenario tiene a la zanfona como protagonista. El músico valenciano ha creado un repertorio donde un instrumento con más de mil años de historia pero muy sofisticado es sometido a la tecnología electrónica del siglo XXI para sacarle nuevas posibilidades.

López para el proyecto «Viola de roda sola» recurre a “una zanfona electrificada y un buen puñado de ecualizadores, loop stations, delays, flangers, phasers, wha whas y demás efectos son todas las herramientas necesarias para perpetrar mi primer proyecto literalmente «en solitario». El repertorio que interpretará describirá musicalmente “desde pasajes ambientales y psicodélicos hasta densas murallas de sonido creados con una de las más antiguas/nuevas fábricas de melodías del planeta, la zanfona”, avanza Efrén.

La zanfona

Este instrumento, que en la actualidad goza de un nuevo renacimiento, apareció en el Occidente europeo hacia el siglo IX con el nombre de organistrum -instrumento que por su gran tamaño tenía que ser tocado entre dos músicos, uno para la rueda y el otro para el teclado-. Poco a poco sus dimensiones se fueron reduciendo y se fue fijando el nombre de sinfonía (del cual derivan otras denominaciones como chifonía, zanfona…).

Aunque en la Edad Media la zanfona era utilizada para la interpretación de música culta, a partir del siglo XVI se dejó en manos de mendigos y juglares, que la convirtieron en un instrumento privilegiado de la música popular.

Más tarde conoció un renacimiento aristocrático en Francia en el siglo XVIII participando en los «conciertos espirituales» acompañada por la orquesta, y actualmente la encontramos en músicas folclóricas en Francia (vielle à roue), Alemania (drehleier), Inglaterra (hurdy-gurdy), Europa Central (forgolant húngara, ninera de Bohemia y Moravia), Italia (ghironda), y en la Europa Oriental (lira belorrusa y relia ucraniana).

La zanfona es sin ninguna duda el cordófono más antiguo de manivela y teclado: la caja de la zanfona toma forma de laúd, trapecio, o también de guitarra.

La tapa presenta una obertura transversal para el paso de una rueda de madera, untada con resina, que se mueve mediante una manivela colocada en la base del cuerpo del instrumento.

El mástil, despegado de la caja, es atravesado por dos, tres o cuatro cuerdas melódicas que se apoyan en un puente central, y otros dos tipos que son los bordones (cuerdas más gruesas encargadas de las notas pedales graves) y las trompetas (conjunto de cuerdas que descansan sobre un puente que está suelto, y que al girar fuerte la rueda, produce un zumbido que se aprovecha para marcar ritmos.

Los tres grupos de cuerdas son frotados simultáneamente por la rueda y la longitud de las cuerdas melódicas es modificada por la acción de un teclado.

Efrén López

En la ya extensa carrera artística de Efrén López se le ha visto con las más variadas formaciones de música tradicional, sefardí, antigua y medieval. Ha sido el fundador de proyectos con gran repercusión como L´Ham de Foc, Aman Aman, Sabir, Trío Petrakis/López/Chemirani y Evo. Colaborador en grupos de música antigua y de raíz como Capella de Ministrers, Ross Daly, Oni Wytars, Maria del Mar Bonet, Estampie,…Incansable explorador de músicas e instrumentos, se aproximó al estudio del repertorio medieval y tradicional “desde el estudio de las múscias modales de la mano de grandes maestros de Grecia, Turquía, Afganistán e India”, estudios que ha realizado junto a Ross Daly, Necati Çelik, Erol Parlak, Daud Khan, Mohammed Rahim Khusnawaz, Yurdal Tokcan, Mehmet Erenler, Erdal Erzincan, Ajoy Chakrabakhti… Su participación en grabaciones discográficas supera las sesenta referencias.

Efrén López en concert Viola de roda sola . Viernes 14 de junio. 21h 07. La Llimera. (C/ Pérez Escrich, 13 • 46008 València). Entrada: 5 €