El trío esloveno entrega su quinto álbum, una reformulación en clave folk vanguardista, realmente un proyecto de muy difícil catalogación y casi tanto como el magnetismo que genera la escucha donde crean paisajes sonoros oníricos, futuristas y multiculturales en base a la instrumentación que emplea. Son más de dos decenas de instrumentos los que tocan Kravanja, Iztok Koren y Samo Kutin, y se pueden escuchar a lo largo de los temas, piezas hipnóticas que en algunos casos sobre pasan un montaje superior a los diez minutos. “Puede decir que la evocación más vívida hasta la fecha del proceso musical altamente colectivo del grupo, que envuelve folclore melódico rústico, texturas extranacionales, estructuras de canciones no lineales y disonancia, y una atmósfera vibrante que por momentos se siente como un ritual extático” se explica en las notas que acompañan la publicación. De alguna forma este álbum da continuación al publicado tres años antes, ‘The Liquified Throne of Simplicity’ (2025). Aquí apuntan un espacio sonoro misterioso, genuino y experimental. “No queremos tocar algo que suene a algo que ya existe”, dijo Samo hace unos años, y siguen sin quererlo. Y proponen: “Clasifíquenlo como música clásica contemporánea, folk imaginario o underground rural, clasifíquenlo como esloveno, clasifíquenlo como quieran”. Lo mejor es dejar que el disco ruede de principio a fin, sin prejuicios hacer una escucha libre.
ŠIROM
In the Wind of Night, Hard-Fallen Incantations Whisper
(Glitterbeat, 2025)
www.glitterbeat.com

